Dos mentes, una aspiración, un deseo. El deseo de crear, transformar e interpretar. Una pasión común: el cristal. Así nació un laboratorio de ideas. Fue en 1955, Pierangelo Gallotti y Luigi Radice fundaron un espacio artístico dedicado a la decoración en cristal. La tradición y la innovación se mezclan y crean una pequeña y preciosa producción. Las primeras obras son los accesorios de iluminación, los artículos de mobiliario y los espejos. Todas las piezas son únicas. Todo hecho exclusivamente a mano.
Los dos socios se dan cuenta de que uno no puede detenerse en la producción artística y la decoración y sienten la necesidad y el deseo de ampliar la colección. Por ello, se inscribieron en la Escuela de Arte Industrial Aplicado del Castello Sforzesco de Milán. Aquí recibieron cursos de dibujo y decoración, comprendiendo en detalle todos los aspectos del diseño técnico y ornamental.
Así surgió un proyecto único, un nuevo reto, nació Gallotti&Radice.
Gallotti&Radice se caracteriza por una producción minuciosa, que requiere una investigación continua y un gran conocimiento y dominio de los diferentes procesos. No se trata de la mano de obra realizada por cualquier trabajador. Son artesanos del más alto nivel, que conocen el material. Conocen el cristal. Maestros y discípulos que guardan los secretos de la artesanía. Una tradición que se ha transmitido durante generaciones.